Pelo largo, lacio y grasiento. Gafas con un espesor de lente comparable al de una ventana antibalas. Astronómico nivel de acné y vello facial. Cuerpo desgarbado y perezoso que puede tomar dos formas bien distintas: obesidad casi mórbida o delgadez y debilidad extrema. Aversión por las relaciones sociales y pánico ante las sentimentales. Monotemáticos, sólo capaces de hablar de temas relativos al mundo en el que viven. Incluso en algunas ocasiones se podría decir que dan grima. Esta podría ser una definición cualquiera de un friki convencional. Del friki que todo el mundo conoce y tiene en su mente cuando te regalan perlas como: "de verdad que no sabía que eras así de friki, si lo llego a saber antes..." (añadir en estos puntos suspensivos la parte que más os guste). Y es que esta sociedad de estereotipos y clichés aún tiene condenado (aunque cada vez menos) a aquellos que disfrutan de elementos considerados como frikis.
Veáse este hombre de la imagen como un ejemplo de los citados anteriormente.
Aquí tenemos otro "especímen" en los que la gente piensa cuando te llama friki "con afecto".
Sin embargo ha surgido una nueva variante del "friki convencional" y no me refiero a esos que por haber jugado dos partidas al LOL o haber visto la serie completa de Death Note se autodenominan frikis, sino a aquellos que a parte de seguir sus mangas y animes con anhelo todas las semanas se esfuerzan por tener a punto sus trajes de cosplay para el siguiente evento. Me refiero a aquella gente que es capaz de compaginar los videojuegos, las películas, la lectura fantástica, los eventos y los coleccionables con la vida real. Estas personas están entre nosotros y no son reconocibles a simple vista por la calle. Estas personas están cenando con su pareja en la mesa de al lado de tu restaurante favorito. Estas personas son amables o no, cariñosas o no, extrovertidas o no, inteligentes o no, vamos, como todos los demás. La única diferencia es que su tiempo libre lo dedican a otros menesteres, se imbuyen en ese mundo FRIKI.
En este blog pretendo dar las claves para reconocer a esas personas, para hallar a estos frikis2.0, para entenderlos mejor y ver que las únicas diferencias que los separan de la "gente normal" son los prejuicios de aquellos que miran sin ver.
Para finalizar este primer post quería mostrarles a los escépticos las maravillas que pueden aportar los frikis2.0 (tanto para ellas como para ellos):
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